viernes, 9 de enero de 2009

Berni juega tenis con su amigo ...

jueves, 8 de enero de 2009

"El entrenamiento mental en el deporte"

El entrenamiento mental en el deporte, es por definición, la práctica habitual de determinadas habilidades psicológicas como estrategia de afrontamiento de situaciones deportivas, tanto en entrenamientos como en competencias. Para optimizar su funcionamiento y lograr de él el mejor resultado, se requiere de un proceso de acostumbramiento progresivo que sólo se va logrando con la práctica reiterada.
Veamos ahora algunos de los diversos factores que se deben tener en cuenta antes de la realización de esta práctica:
1) Poseer la técnica adecuada para su implementación.
2) Clarificar debidamente el encuadre, como la forma en que se debe estructurar el trabajo, de manera que la propia actuación o la de aquellos vinculados a ella, no dificulten los objetivos que se persiguen.
3) Se deberá estudiar previamente cuál es la real necesidad y ver si esta técnica se puede aplicar en función de las individualidades existentes y del entorno.
4) Se deberán analizar exactamente cuales son los objetivos, y viendo cuales se deberán priorizar, si los personales, los grupales, deportivos o institucionales, e incluso los diferentes estilos de vida.
5) Esclarecer debidamente el carácter de la tarea y el manejo de la información que de ella resulte.
6) Comenzar la aplicación de la técnica sobre las bases de aceptación, de acostumbramiento, hasta lograr la automatización para luego recién comenzar con lo proyectivo.
7) Realizar la práctica en lugares que sean reconocidos por los deportistas, que nos permita entrenarla tanto en lugares de entrenamiento como de competencia.
8) Ser sumamente crítico sobre los resultados de la misma, ver y dialogarlo con los deportistas, ver si son los resultados esperados o por lo menos éstos generan un beneficio en la vivencia del deportista, ya sea en sus etapas de competencia, descanso, concentración, sueño, etc.
En lo que respecta a nuestra experiencia en la aplicación de técnicas de control mental en el deporte, lo hemos hecho con diversos objetivos. Básicamente nos podríamos referir a los más comunes como ser: contralor de ansiedades pre-competitivas, ansiedades post-competitivas como ser el insomnio, y para el manejo de situaciones competitivas por visualización, manejo de los diferentes niveles de agonística, etc. Bajo estos parámetros hemos organizado la técnica en un proceso de cuatro etapas diferenciadas y consecutivas, es decir que si procuramos una buena aplicación de la misma no podremos saltear ninguna de estas etapas, aunque si podríamos llegar a sintetizarlas luego de un largo proceso de acostumbramiento. Las etapas son:
- Relajación Físico Conciente
- Relajación Corporal Inducida
- Inducción por Visualización
- Descanso
Las dos primeras etapas de relajación tanto conciente como inducida, son sobre las técnicas básicas ya conocidas de Jacobson. Luego se deberá centrar el trabajo sobre la técnica de respiración, elemento fundamental de toda práctica de relajación y/o concentración. Para llegar finalmente a la etapa de la inducción por visualización. En este momento deberemos tener muy en claro que es lo que pretendemos hacer con ella. Es decir, que debemos reconocer previamente cual es la necesidad primordial que procuraremos satisfacer, o cual el aspecto a corregir, o si es necesario movilizar, calmar, o procesar con anticipación lo que significan los nervios previos a un gran enfrentamiento, etc.
La visualización como técnica es utilizada para evaluar situaciones, o para anticiparse a los procesos que estas originan sobre los que ya nos hemos extendido, pero también para el control de respuestas fisiológicas como ser, frecuencias cardíacas, registros del umbral del dolor, síndrome de ahogo por altura, para modificar los tiempos de reacción que cada deportista debe tener incorporado según su deporte o especialidad, ya que estos no son los mismos para un jugador de fútbol que para un nadador, que espera una señal de activación, luego de un alerta previo y sabiendo que es una situación única, que no se repite. Esta es una técnica que programa la mente del deportista a reaccionar, a responder cuando y como se la ha programado. Es hacer pensar con imágenes a través de las palabras o pensamientos, en función del registro previo de una situación deportiva ya vivenciada que se va a poner en juego nuevamente, entonces trataremos de predeterminar esta situación para así acortar los plazos de reacción, evitar la sorpresa, anticiparse a la posible jugada rival, es trabajar sobre el conocimiento de las destrezas técnicas del otro, lo que ese otro puede llegar a poner en juego en ese momento como ocasional rival. Es decir poner en situación de máxima activación a nuestro deportista para cuando se le sea requerida y que a su vez éste se acostumbre a entregar el máximo de sus posibilidades. La visualización no sólo pone en juego el sentido de la vista, sino que aúna todos los sentidos en su práctica en función de la capacidad que tiene el sujeto de evocar o formar imágenes. Cuando el deportista imagina determinadas situaciones de juego, involucran a través del movimiento, emociones, sentimientos, olores, despliegues físicos, que aunque sin realizarlos en forma real, ponen en funcionamiento a nivel mental los mismos mecanismos internos que cuando efectivamente realizan la experiencia práctica.
Para leer el articulo completo: Psicología del Deporte